/1092/
ADICIÓN
En el tiempo que ha durado la publicación de esta obra, han sufrido ligeras
variantes algunos servicios que dejamos anotados, y nos parece oportuno dar
cuenta de las modificaciones introducidas en ellos, ya que todavía podemos
recogerlas en beneficio del lector .
Al mismo tiempo ampliaremos algunos particulares que á nuestro juicio lo
merecen, y nos haremos cargo de algunas omisiones que hemos notado.
* * *
En la página 238, los totales que aparecen en el estado de Profesiones,
son distintos á los que figuran en el estado de 1900, y esto se debe á que
un mismo individuo puede tener varias profesiones y figurar, por tanto, más de
una vez, que es la norma que se siguió al formar estos estados por las oficinas
correspondientes.
Las noticias que hemos dado de las defensas militares con que cuenta
Guipúzcoa en la actualidad ó se hallan en proyecto para su ejecución, en las
páginas 254 y 255, no están debidamente detalladas, y vamos á ampliarlas en la
medida que asunto de tanto interés lo requiere.
Por R. O. de 20 de Octubre de 1890, se dispuso la formación del Campo
atrincherado de Oyarzun por el cuerpo de Estado Mayor, quien dió cima á su
cometido en la forma siguiente. Constaría el campo de ocho fuertes: Guadalupe,
San Marcial y Erlaitz en primera línea, formando un ángulo dirigido á Francia,
cuyo vértice era San Marcial. Constituían la segunda línea San Enrique, Arkale y
Belitz, y la tercera ó la de reserva, los fuertes de San Marcos y Choritokieta.
Además de estos fuertes y obras anejas á los mismos, se proyectaba construir
dos baterías para cerrar la entrada del puerto de Pasajes en los puntos en que
estuvieron situados los antiguos fuertes de Lord Jhon, Hay y del Almirante, y
otras tres baterías situadas en los montes de Ulía, Urgull y Montefrío, para la
de San Sebastián y su fondeadero. No se decidió si habían de construirse en
Oyarzun, Alza ó Ancho, los almacenes, parques, hospitales, cuarteles y demás
dependencias.
El fuerte de Guadalupe se construyó en 1889 y 1900, con un coste de doce
millones de pesetas, y se halla situado en la vertiente NE. del Jaizkibel, á
210 metros de elevación sobre el nivel del mar, y su forma es trapezoidal.
San Marcial, en proyecto, es más bien un fuerte avanzado, enclavado en el
extremo NE. de una estribación de la Peña de Aya, á 230 metros de altura, y
sirve para prolongar la acción de Guadalupe hasta Endarlaza.
Erlaitz, á 500 metros sobre el mar, en el extremo occidental de la misma
estribación del monte Aya. Está terminada la traída de aguas, notable por el
sistema de arietes hidráulicos que se emplea, y también lo está la carretera que
le une con Irún.
San Enrique, en proyecto, á 550 metros sobre el mar, en la cumbre del
Jaizkibel.
Arkale, en proyecto, en el monte Feloaga, donde estuvo el antiguo castillo
de este nombre, en Oyarzun, uno de los que se entregaron, en 1200, al Rey de
Castilla.
Belitz, en proyecto, situado en una estribación al N. de la Peña de Aya, á
unos 500 metros de altura. San Marcos, á 286 metros de altura. Fué el primero
que se construyó, y todo él es de mármol rojo de una cantera inmediata. Está; dominado este fuerte, muy de cerca, por el
monte Choritokieta ó Galzaun, sobre el cual ha sido preciso edificar otro fuerte
pequeño, que sirve de reducto al anterior.
De toda esta serie de fuertes, como se ha dicho, los únicos construidos son
los de Guadalupe, San Marcos y Choritokieta. En Erlaitz existen la traída de
aguas y el camino y una casa para el guarda.
En la página 259 decimos, al hablar del instituto de la guardia civil, que
Guipúzcoa pertenece al tercio de Vitoria, y como después ha sufrido cambios la
organización de este cuerpo, en el día corresponde al tercio de San Sebastián,
cuya cabecera se encuentra en esta capital. Antes era la tercera compañía la que
guardaba Guipúzcoa, pero hoy es la cuarta. Tolosa ha sido y sigue siendo la
cabecera de la compañía, no de la comandancia, como equivocadamente se dice en
la página citada.
En la página 310 decimos que la primera piedra del puerto de Fuenterrabía se
pondría en Septiembre de 1914, coincidiendo con las Fiestas Euskaras que se iban
á celebrar aquellos días. Las Fiestas Euskaras se suspendieron por motivos de la
guerra, y las obras del muelle comenzaron el 5 de Diciembre, debiendo terminarse
á los tres años, ó sea él 5 de Diciembre de 1917. La subasta se hizo el 22 de
Septiembre de aquel año, adjudicándosele á don Manuel Guindos, por la cantidad
de 716.000 pesetas. El puerto tendrá 160 metros por 120 aproximadamente, ó sea
19.000 metros cuadrados, con una profundidad en baja mar de 4, 5, 6 y 7 metros,
que fácilmente pueden aumentarse por ser el suelo de arena. Hoy pueden
refugiarse barcos de 10.000 toneladas (18 pies de calado).
En la página 337 no se ha incluido el convento de Beatas Trinitarias
descalzas de Zarauz, fundado en 1619, y que dejó de existir hace muchos años.
Nos hacemos cargo en la página 365 de que se han omitido los pueblos de
Legazpia é Ichaso, entre los que forman el partido judicial de Vergara.
El servicio de correos de la Provincia, que dejamos anotado en la página
530, ha sufrido alguna modificación con la R. O. de Abril de 1917, que dispone
la supresión del servicio de Tolosa á Goyaz, y el peatón de Azpeitia á Régil,
creando en su lugar otra conducción del correo en automóvil de Tolosa á Albíztur,
Vidania, Goyaz, Régil y Azpeitia, con dos expediciones diarias de ida y vuelta.
Conocemos el R. D. de 8 de Junio de 1910, en que se dispone que desaparezcan
las denominaciones de escuelas elementales, completas, incompletas y superiores,
y que todas se llamen en lo sucesivo «Escuela nacional de enseñanza primaria»,
que por R. 0. de 31 de Marzo de 1911 se cambió en «escuela nacional de primera
enseñanza», y si, á pesar de esto, hemos seguido empleando la clasificación
antigua, ha sido tanto por no variar el método que habíamos comenzado á emplear
en este tomo, antes de la citada disposición, cuanto por dar á conocer á
nuestros lectores la categoría que alcanzaban y la designación con que se
distinguían precedentemente estos centros escolares en los diversos pueblos de
la Provincia.
En último término, queremos hacer constar que en la acentuación de los
nombres de los pueblos, nos hemos atenido al criterio seguido en los documentos
oficiales, aunque no siempre haya coincidido con nuestra opinión particular.
|