Situación: Término
municipal de Zestoa (Cestona).
Accesos: Desde
Azpeitia a Régil carretera comarcal 6324, desvío taberna Benta-Berri.
Servicios: Iraeta jatetxea
tel. 943 14-76-39; Landa asador tel. 943 14-71-97; Portu jatetxea tel. 943
14-79-45; Agiña erretegia; Caserío Granada tel. 943 81-53-55; Benta-berri
tel. 943 81-35-49; Letea tel. 943 81-28-87; agroturismo Tolare-Berri 943
14-77-47
Elementos
notables: Ermita de Santa Engrazi.
Cartografía: hoja 63-4
escala 1:25.000 del Mapa Topográfico Nacional.
En el extremo norte del macizo de Ernio, recogido
entre las cumbres de Ertxin y de Santa Engraci, se abre el valle de Aizarna.
Valle de cuenca cerrada, uno de los pocos que existen de estas
características en Guipúzcoa, guarda en su centro uno de los pueblos más
antiguos de nuestro territorio: Aizarna.
Aizarna dominaba una antiquísima encrucijada de
caminos. Una de las rutas traía a los caminantes desde el interior de Navarra
hasta los puertos de la costa (especialmente Getaria y Zumaia). La segunda
calzada, en una componente Este Oeste, correspondía a la mítica calzada de la
costa. La tradición de que la iglesia de Aizarna perteneció a los templarios
apunta bien esa teoría. Finalmente nos quedaría la singular situación
geográfica de la actual ermita de Santa Engraci, emplazamiento más propio de
una fortaleza vigilante que de un santuario. Otra cosa muy distinta es que en
el paso de los siglos el castillo terminara transformándose en ermita, como
ha sucedido en otros muchos lugares del País Vasco.
Desde el punto de vista histórico, y en el siglo
XIV, el pueblo de Aizarna dio vida a la población fortificada de Santa Cruz
de Cestona. Es decir, de Aizarna se fundó Cestona. Lo que ocurrió después fue
que con el paso de los años, la localidad amurallada levantada en el valle
del Urola terminó por imponerse al pueblo que le había dado el ser y Aizarna
finalizó transformándose en un barrio de Zestoa.
Aizarna se quedó en la montaña, enmarcada entre la
iglesia de Nuestra Señora de Asunción y ermita de Santa Cruz, y las calles de
“Gurutze santuaren Kalea”.
La portada gótica de la parroquia de Asunción
guarda una magnífica talla de Andra Mari. Iglesia de aspecto severo y
formidable torre de sillería, ya he apuntado antes que sus orígenes los lleva
el pensamiento popular hasta los templarios. En el interior de ese templo,
además de su retablo principal, y el blanco labrado en piedra de capilla
lateral, destaca su arco campanel que recoge una extraña labra
antropomórfica.
De cara a la parroquia se encuentra la ermita de
Santa Cruz. Su atrio sirve de paso entre las dos únicas calles de Aizarna.
A unas decenas de metros al norte del templo de
Nuestra Señora de la Asunción, se localiza el caserío Aranburu. Al lado de
esta casa podemos contemplar uno de los sumideros más importantes de ese
valle de cuenca cerrada de Aizarna.
El acceso moderno arranca en el cruce de la
carretera GI-317, que enlaza
Iraeta con Meagas. Parece superponerse al Camino
Real del siglo XVIII. En pocos kilómetros ascienden hasta el valle sobre la
vega de Iraeta. En el camino se pasa cerca de los caseríos de Lizasoeta
Haundi, que aunque en estado ruinoso todavía mantiene su porte majestuoso; la
ermita de San Juan y el caserío de Askatazu. La ermita es sencilla y de
proporciones reducidas. La fisonomía actual deriva de las obras de reforma
realizadas en el siglo XVIII.
La carretera a Santa Engracia que parte del casco
urbano de Aizarna pasa junto a los caseríos de Aizpuru, Egaña Goikoa, datados
en el Siglo XVI y Cistorriza, con arco apuntado a la entrada. Está situada en
la parte final del Ernio. Santa Engraci tiene forma de fortaleza, por ella
parece ser que pasaba la vieja ruta de Navarra a la costa Guipuzcona, hoy en
día se utilizan como caminos de transhumancia.
La ermita se sitúa en lo alto de una pequeña colina,
desde donde se domina una buena panorámica de la comarca. El edificio es
sencillo como corresponde a una ermita con el sistema auzolan. Hubo otra
ermita anterior que fue destruida por un rayo, de la que conserva la portada
en arco ojival. En ella tenía su sede la Cofradía de Santa Engracia, fundada
en 1.600 a la que pertenecían la mayoría de los parroquianos de Aizarna. Al
pie de la ermita se sitúa el humilladero de la Virgen. Es posible que el
primitivo templo (o castillo en su origen) fuera más pequeño que el edificio
actual.
La luz entra por tres ventanas, algunas de ellas
presentando arcos ligeramente apuntados. La puerta de entrada, dovelada,
guarda a su lado una tosca aguabenditera con una cruz ya muy gastada. En el
interior, en el altar central, se venera a Santa Engraci. A su lado, la
maquinaria del reloj de esa iglesia.
Desde la altura de Santa Engraci se domina todo el
valle de Granada erreka, Andatza y las tierras de Alzola y Aia.
Desde la venta de Santa Engrazi, la cima de la
peña que guarda la ermita de la misma denominación quedará a sólo 15 minutos
andando siguiendo un camino empedrado. Está situada en una colina a 510 m y
es inconfundible por su cruz, desde donde se domina el macizo de Ernio,
macizo de Izarraitz, valle del Urola, costa guipuzcoana, y el valle de
Aizarna.
La carretera continúa hasta la ermita de San
Isidro de Erdoizta, en el término municipal de Errezil, por el trazado de la
ruta ancestral, que cruza por paisajes poco degradados y de gran belleza. El
caserío Ezkurra se sitúa en este paisaje.
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