NOTICIA DE LAS COSAS MEMORABLES DE GUIPUZCOA / PABLO GOROSABEL

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LIBRO I

DESCRIPCIÓN DE LA PROVINCIA

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CAPITULO I

DEL TERRITORIO, SU EXTENSIÓN Y POBLACIÓN.

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SECCION III

De los censos de población

 

/60/Nuestros antiguos gobernantes no tuvieron el cuidado de dejarnos una noticia, si no exacta, al menos aproximada, del número de. personas que han habitado en su territorio en cada época; sus estados, clases y sexos. Por esta razón, a la distancia en que nos encontramos, es poco menos que imposible presentar con alguna seguridad el cuadro del movimiento progresivo de su población; como sería de desear, verificarlo en la presente obra, destinada a dar una idea la más completa posible de la Provincia bajo todos los conceptos. Que su vecindario era bastante escaso en la antiguo y aún hasta bien entrado el siglo XVI, parece lo justifica la poca importancia que tuvo este país en la opinión común de los forasteros y extranjeros. Pruébalo también su desparramado modo de vivir en caseríos aislados de labranza y sobre todo la suma escasez de mantenimientos que producía su ingrato suelo, á que e era consiguiente la emigración de familias a otros puntos más fecundos. Tal es en globo la idea que formará cualquiera que estudie el modo de vivir antiguo de los naturales de esta provincia, si se despoja del entusiasmo /61/ y pasión. Como después se han ido aumentando los medios de subsistir, así también ha acrecido el vecindario, de manera que hoy día con doble número de habitantes que hace tres siglos, se sostiene cómodamente.

Según dice D. Isidoro Antillón, Guipúzcoa es la provincia más poblada, con proporción á la extensión del territorio que ocupa, con más de dos mil habitantes por cada legua cuadrada. Este aumento progresivo se ha verificado más notablemente desde hace un siglo á esta parte; época en que se han reducido á cultivo multitud de terrenos eriales, y cuando más poblados de árboles robles, hayas y otros semejantes. La mayor parte de estos montes eran de propiedad de los pueblos, Cuya enajenación estaba prohibida por las leyes. Si alguna vez se trataba de ello, era preciso obtener una real autorización, acudiendo al Consejo de Castilla con. el oportuno recurso, cuyas diligencias costaban bastante dinero, y su resultado era siempre tardío y difícil. Pero vinieron luego las necesidades de los pueblos con motivo de los gastos ocasionados por las guerras que les obligaron á desprenderse de sus propios; y de aquí resultó la circulación de estos bienes, la roturación de muchos que estaban incultos, y la construcción de multitud de caseríos de labranza. En una palabra, se aumentaron los mantenimientos y modos de vivir de las gentes, y por medio de aquellos el número de estas. Semejante resultado viene á demostrar prácticamente con cuanta razón dijo Malchus, que la especie humana halla obstáculos á su multiplicación en la falta de subsistencias ó de alimentos. Pero dejando de continuar ocupándonos ,  estas consideraciones generales, pasemos á tratar del objeto principal de la presente sección que /62/ es el dar en lo posible una noticia del vecindario anterior y actual de esta provincia. El dato más antiguo que se encuentra acerca de este asunto consiste en una relación que el Obispo de Pamplona envió al Gobierno del Rey en el año de 1587 del número de vecinos y pilas bautismales que había en toda su Diócesis. Figuran en esta relación los dos Arciprestazgos de Guipúzcoa pertenecientes á ella, que eran los denominados mayor y menor; faltando, por consiguiente, el de Leniz correspondiente al Obispado de Calahorra, de cuyo Prelado no se encuentra semejante noticia detallada. Según aquella relación, en el Arciprestazgo mayor había 8724 vecinos y en el menor 1680; que componían un total de 10404 vecinos, ó sea de familias independientes. Para aproximarnos al conocimiento de los que habitaban en el Arciptestazgo de Leniz, no se encuentra otro medio mejor que el del encabezamiento fogueral que tenían en aquella época los pueblos del mismo, que consistía en 456 fuegos. Computándolos a1 respecto de cinco vecinos y medio, dan por resultado la existencia de 2508 vecinos, ó sea de familias. Unidos, pues, estos a los de los otros dos Arciprestazgos, se ve que en el último del siglo .XVI había en Guipúzcoa 12912 vecinos; los cuales multiplicados por cinco hacen una suma total de 64560 almas, ó sea de habitantes.

Igual resultado con muy corta diferencia se descubre girando el cálculo por medio de la foguera en que cada pueblo estaba encabezado en aquella época. Su conjunto ascendía á 2335 fuegos, que vienen á producir un total de 64210 almas o habitantes con poca diferencia, sin comprederse en este cálculo la villa de Oñate, por no pertenecer a Guipúzcoa en aquel tiempo. Computando su población /63/ proporcionalmente con la de los otros pueblos en 300 vecinos y estos a igual razón de cinco almas por cada uno de los mismos, tendremos que el vecindario total de los pueblos, que componen en el día esta provincia, ascendía en la citada época á 67710 almas. El cálculo formado por la Diputación en 29 de Marzo de 1830, al contestar al Gobierno de su Majestad sobre el mismo asunto, no tuvo mucha diferencia. Por falta de datos exactos, dicha corporación. se valió de las notas de los servicios de harinas, que los naturales hicieron en los años de 1558, 1559 y 1596 para la entrada en Francia y defensa de la frontera. Comparándolas con los estados de tercios que había á la sazón, dio el resultado de la existencia de 69665 almas  entre mediados á fines del siglo XVI.

Por orden del Gobierno del Rey, se hizo como se sabe en 1768 el censo general de la población de todas las provincias de la monarquía. Guipúzcoa fue comprendida también en esta disposición real; pero la operación practicada sobre el particular apenas nos da la conveniente aclaración de su verdadero vecindario. El estado que se publicó no se halla, en efecto, formado por provincias sino por Obispados, cuyos Prelados probablemente recogerían las noticias por arciprestazgos y vicarías, de que carecemos. Volvió á formarse por el gobierno en 1787 otro censo general de población de España; según el cual, había en esta provincia, sin comprender la villa de Oñate, 114305 almas de todas clases, y con inclusión de esta, 120716. Este vecindario se hallaba distribuido en los estados y clases siguientes:

 

Varones 57236

}120716

Hembras 63480 

/64/

Clerigos 697 }1515
Frailes 297
Monjas 521
Abogados 56
Escribanos 119
Varones solteros 34202
Varones casados 20139
Varones viudos 2131
Hembras solteras 36355
Hembras casadas 20474
Hembras viudas 5827
Personas de ambos sexos acogidas en hospicios, casas de misericordia y hospitales }444

 

A consecuencia de otra orden dirigida por el Gobierno del Rey, el Corregidor de la Provincia hizo en 1799 un nuevo censo de población de la misma. Sin comprender en él la villa de Oñate, resultaron en los demás pueblos 104479 habitantes, lo cual da una disminución de 9826 personas en el período de doce años. Tal diferencia pudo proceder en parte de las guerras, emigraciones y las muchas enfermedades epidémicas que hubo en el intern1edio. Posible es también que algunos pueblos hubiesen rebajado en los estados remitidos su verdadero vecindario por miedo del servicio militar de tercios, recargo de contribuciones, o por otros motivos que no están á nuestro alcance. Consiguientemente, aquel censo de población hecho en estos términos, no puede considerarse por suficiente, exacto, ni aproximado, como sucedió generalmente. En virtud de disposiciones del mismo Gobierno, que conoció aquellos defectos, se trató en los primeros años del presente. siglo de reconocer y rectificar el censo de población anterior de /65/ esta provincia. Pidiéronse para el efecto los estados de ella a los pueblos con las correspondientes clasificaciones, y algunos de estos aún los enviaron a la Diputación; pero no se llegaron a completar, con motivo de la invasión de los ejércitos franceses el año de 1807, que absorbió toda la atención de la provincia.

Habiendo quedado en tal estado las cosas, la variación de la foguera, tratada en las Juntas generales de Cestona de 1816, ocasionó un acuerdo de las mismas, para adquirir los datos más exactos posibles del vecindario de cada pueblo. Se añadió que en su vista, formando la Diputación el estado general de la población de todo el solar guipuzcoano, lo comunicase a los pueblos con término de un mes, y que con lo que expusiesen estos se presentase concluido el arreglo a la aprobación de las Juntas inmediatas. No tuvo efecto hasta las celebradas eh la villa de Zarauz el de [sic]1819, en las cuales toda la población de Guipúzcoa, con inclusión de la villa de Oñate, se fijó en 104044 habitantes. Halláse, pues, que en este arreglo resultaron 4671 personas de menos, respecto de los que se fijaron en el catastro formado en 1799, lo cual no entiendo cómo podía ser,  a pesar de la gente que hubiese muerto durante la guerra de la independencia. Semejante resultado hace cuando menos dudar acerca de la exactitud de los datos suministrados para el efecto. Así es que la Diputación provincial, desconfiando de ella, formó el año inmediato otro nuevo estado de la población, con motivo del establecimiento de los tres Juzgados de primera instancia, según el cual existían en toda la Provincia 112283 almas.

Llegando a la época presente, se ve que en el censo que se formó el año de 1844, para el arreglo /66/ de los cuatro Juzgados de primera instancia, resultaron existentes á la sazón 109879 habitantes, cifra cuya inexactitud es notoria. Así es que en el que se hizo en 1857 por disposición del Gobierno, con inclusión de los extranjeros establecidos y rebaja de los transeúntes, existían en esta Provincia 154210 habitantes. Por último, en el estado de la población formado también por orden del Gobierno en la noche del 2 de Diciembre de 1860, resultaron existentes 162547 personas, de las cuales son rebajables 3823, entre militares en activo servicio y a transeúntes, y :nacionales como extranjeros, Con su deducción quedó el verdadero vecindario de Guipuzcoa en 158724 almas, o sean 4514 más que en el censo anterior, La clasificación principal contenida en aquel estado fue como slgue:

 

Varones 78336 }158724
Hembras 80388
Eclesiásticos 555 }1268
Institutos religiosos Varones 131
Hembras 582
Abogados 102
Escribanos y notarios 63
Médicos y cirujanos 125
Boticarios 44
Arquitectos y maestros de obras 29
Maestros de enseñanza 1ª 124
Maestras de Id. Id. 67
Niños asist. a escuelas 7035
Niñas id- 4944
Pobres de solemnidad Varones 620 }1547
Hembras 927
Jornaleros de fábricas Varones 2057 }3290
Hembras 1233