3.5
LOS RÍOS
© Ana SOLA BUENO
Desde el punto de vista hidrológico y aún cuando el principal curso fluvial
del municipio de San Sebastián es el río Urumea, los distintos cursos de agua
que discurren por el territorio municipal pertenecen a cuatro cuencas
hidrográficas diferenciadas: cuenca del Urumea, cuenca del Oria, cuenca del
Oiartzun y cuenca de la regata Añorga, a las que hay que añadir además las
pequeñas regatas de la alineación costera (Mendizorrotz, Ulía) que vierten
sus aguas directamente al mar Cantábrico.
3.5.1 CUENCA DEL URUMEA
El río Urumea y sus tributarios por ambas márgenes constituyen el eje
hidrográfico central del municipio de San Sebastián, a lo largo del cual y
procedente de Astigarraga discurre con un curso de dirección S.-NNO. dividiendo
al territorio en dos mitades diferenciadas: la occidental, con los barrios de
Amara, Centro-Parte Vieja, Antiguo-Igara, Aiete, Añorga, Morlans, Miraconcha,
Igueldo, etc. y la oriental, en la que se localizan los barrios de Gros,
Ategorrieta, Intxaurrondo, Eguía, Martutene, Loiola, Alza, etc.
Con una longitud de 55,32 Km, un curso de dirección S.-NO., y una superficie
de cuenca de 279,05 Km2, el cauce principal nace a una altitud de 695 m en el
alto de Ezkurra, en la provincia de Navarra, discurriendo por territorio de
dicha comunidad durante algo menos de la mitad de su recorrido, cubriendo
alrededor de un tercio de la superficie total de su cuenca. La pendiente media
del curso principal es del 1,26%, mientras la de la cuenca, muy superior,
alcanza un porcentaje del 16,45%, valores de los que es fácil deducir la alta
torrencialidad que posee tanto el curso principal en algunos tramos, los de su
cuenca alta, como muchas de sus regatas tributarias.
La cuenca alta en la que recibe la denominación primero de Bedarán y luego
de Ollín (en referencia a las antiguas minas: espato de flúor y plomo
argentífero) comprende desde su nacimiento hasta la localidad de Goizueta (155
m) y en ella el curso del río discurre sobre los materiales paleozoicos del
macizo de Cinco Villas, fundamentalmente pizarras, grauvacas y pasadas de
conglomerados silíceos, cuya elevada dureza unida a la complejidad tectónica
del área y a las fuertes pendientes han excavado un valle encajado y tortuoso.
Así, en este tramo de cabecera, la pendiente media es del 2,45%, alcanzándose,
no obstante, pendientes medias en determinados tramos de sus primeros 10 Km que
superan el 5%. Durante este trayecto, el Urumea recibe el aporte de diversos
tributarios por ambas márgenes, la mayor parte de ellos de régimen torrencial.
Así y por su margen izquierda los afluentes de mayor importancia son las
regatas Urdiñola e Iturri, las cuales procedentes de las inmediaciones de
Urepel (1056 m) y Mandoegui (1045 m), cimas que constituyen la divisoria de
aguas con el río Leizarán, aportan sus aguas al curso principal aguas arriba y
aguas abajo de Goizueta, respectivamente. Por la margen derecha, el Urumea
recibe a su tributaria la regata Zumarrezta que, procedente de las inmediaciones
de las cimas de Irakurri (1142 m), Iruñarri (1051 m) y Loizate (1037 m),
confluye con el curso principal aguas arriba de la regata Urdiñola.
Su cuenca media se extiende aproximadamente desde la localidad de Goizueta
hasta la de Ereñozu (28 m), situada, ya en territorio guipuzcoano y en concreto
dentro del término municipal de Hernani, aguas abajo de la confluencia por su
margen derecha con la regata Latxe. Con una pendiente media del 0,5-0,6%, el
curso principal sigue discurriendo sobre pizarras y grauvacas del Devónico-Carbonífero
(Paleozoico), caracterizados además de por su dureza por la baja solubilidad de
los minerales que los componen. Así, dichos materiales han condicionado y
determinado, por una parte, la propia morfología y morfometría de la cuenca
que presenta un recorrido sumamente meandriforme en este tramo, siendo un buen
ejemplo de ello el meandro de Pagoaga, originado como consecuencia de la elevada
fracturación de los materiales en esta zona y del diferente comportamiento de
pizarras y grauvacas frente a la erosión fluvial (la orilla cóncava se ha
desarrollado sobre las grauvacas, generando una ladera fuertemente escarpada,
mientras en la convexa formada sobre pizarras se han depositado los materiales
en suspensión), y, por otra, las propias características de mineralización
del agua, cuya conductividad media anual en la estación de Ereñozu para el
año hidrológico 95-96 y tras drenar en torno a las tres cuartas partes de la
cuenca total (214,1 Km2), apenas alcanza los 200 (S/cm.
Es en este tramo, en donde además de la regata Latxe, el Urumea recibe a dos
de sus principales afluentes: la regata Urruzono, que procedente del valle
delimitado entre el cordal de cimas que se extiende desde Unamuno (881 m) hasta
Adarra (811 m)-Mandoegui, confluye en la margen izquierda del Urumea a la altura
de Ugaldetxo, y el río Añarbe. Este último confluye por la margen derecha del
curso principal a la altura aproximada del pK 19 de la carretera GI-3410, aguas
arriba de la confluencia de la regata Urruzono, y se configura a partir de los
aportes de las regatas Artikutza (Izu, 829 m), regulada por el embalse del mismo
nombre (8,73 Km2 de superficie de cuenca y 1,6 Hm3 de capacidad) y que abastece
a las zonas altas de San Sebastián y a Lezo, y Elama (Aloña, 1.037 m). El
Añarbe es también un río regulado. En efecto, el embalse de Añarbe,
constituido como divisoria del territorio navarro con el guipuzcoano, drena una
superficie de cuenca de 62,9 Km2 y posee una capacidad máxima de almacenamiento
de 43,5 Hm3, la cual le permite el abastecimiento de agua no sólo al municipio
de San Sebastián, sino a gran parte de los de la comarca de Donostialdea.
La escasa concentración de población y la ausencia total de industrias
tanto en la cuenca alta como la media, teniendo en cuenta el carácter
típicamente rural de los municipios por los que discurre (Goizueta, Arano y
Hernani hasta Ereñozu), cuya actividad principal se centra en torno a las
explotaciones agropecuarias, implica que el hábitat fluvial esté muy bien
conservado, con una excelente calidad de aguas tanto desde el punto de vista
físico-químico como biológico (índice biótico BMWP' superior a 150; clase I:
aguas muy limpias y de muy buena calidad). Además, la elevada pluviometría de
la cuenca repercute en caudales elevados, de tal forma que en Ereñozu el caudal
medio diario durante el año hidrológico 95-96 haya sido de 4,611 m3/s, con un
máximo medio diario de 53,606 y un mínimo de 0,837 m3/s. la media diaria anual
es de 4, 611 m3/s, correspondiendo el máximo absoluto al día 27 de julio de
1996 (210,23 m3/s) y el mínimo absoluto al 11 de noviembre de 1995, con tan
sólo 407 l/s.
Caudales mensuales de la estación de
Ereñozu (Hernani - Gipuzkoa) m³/s
(Año hidrológico 1995-1996)
|
|
Media
|
Máximo
|
*Mínimo
|
OCT
NOV
DIC
ENE
FEB
MAR
ABR
MAY
JUN
JUL
AGO
SEP
|
1,947
1,781
5,110
5,198
12,544
7,691
3,888
5,008
2,075
5,541
2,582
3,192
|
4,017
7,390
16,701
8,889
22,879
13,401
6,144
11,255
5,948
53,606
5,681
8,638
|
1,354
0,855
1,633
0,837
4,387
4,250
2,653
2,271
1,333
1,408
1,610
1,482
|
|
|
|
|
Una de las principales problemáticas asociadas al río en esta zona e
incluso también aguas abajo de la misma es la derivada de la presencia de un
gran número de aprovechamientos hidroeléctricos (aguas arriba de Ereñozu:
Arrambide, Mendaraz, Santiago, Pikoaga; en Ereñozu, Renteria y aguas abajo de
Ereñozu: Fagollaga, Lastaola, Biyak-Bat y La Harinera), de tal forma que
prácticamente podríamos decir que las minicentrales constituyen un continuo
espacial a lo largo del curso del Urumea. Su presencia supone, por una parte, la
detracción de caudales del cauce principal, que implica que especialmente en el
estiaje el caudal circulante pueda ser inferior al caudal medioambiental
necesario para el mantenimiento de la vida piscícola, y, por otra, la barrera
que los azudes o presas de derivación de dichas centrales suponen para la fauna
piscícola, aunque en la actualidad sólo son tres las que no disponen de
escalas de peces.
Otra de las problemáticas ligadas al curso del Urumea en esta zona es
también la paulatina pérdida de la vegetación potencial, correspondiente a
robledales acidófilos y robledales bosques mixtos en altitudes medias y a hayas
en alturas superiores a los 500-600 m con presencia de alisos en las
proximidades del cauce sin que éstos lleguen a configurar alisedas
desarrolladas debido a las elevadas pendientes y al encajonamiento del río en
este tramo así como a la propia torrencialidad del agua, como consecuencia, por
una parte, de la intensa actividad ferrona y carbonera de la que ha sido objeto
y, por otra, de la sustitución de dicha vegetación autóctona por bosques de
explotación (pinares). A pesar de ello, podemos afirmar que la vegetación de
ribera presenta en las cuencas altas y media un buen estado de conservación,
siendo destacables las importantes extensiones de robledales autóctonos que
permanecen intactas a lo largo de su curso, configurando un paisaje de gran
belleza que merece ser protegido y conservado.
Superada ya la altura de Ereñozu (Hernani), el río entra en su cuenca baja,
siendo su pendiente media en este tramo del 0,224% y desembocando en el mar a la
altura del puente de la Zurriola de San Sebastián, entre los montes Urgull y
Ulía. Es interesante señalar en este punto el hecho de que antes de la
conocida transgresión flandriense, la desembocadura del río Urumea se situaba
mucho más lejana que en la actualidad (entre la isla de Santa Clara y Urgull),
debido a que el nivel del mar se situaba entonces por debajo del nivel actual.
Sin embargo, dicha transgresión unida a las corrientes marinas, al oleaje, al
viento y a los propios aportes de sedimentos del río, supuso la acumulación en
el tiempo y en el espacio de toda una serie de materiales al pie de la vertiente
meridional del monte Urgull, originando el amplio tómbolo que hoy en día
conocemos y en el que se asentó precisamente el primer núcleo de población de
San Sebastián.
Durante este tramo y salvo su recorrido entre las localidades de Ereñozu y
Epele, área en la que su drenaje sobre materiales de alta erosionabilidad, en
primer lugar, conglomerados, areniscas y lutitas y a continuación margas y
margocalizas cretácicas (inferior y superior) produce un ensanchamiento
significativo del valle, su curso transcurre sobre materiales cuaternarios,
básicamente gravas, arenas y limos, es decir materiales aluviales depositados a
lo largo de su lecho, junto con otros materiales coluviales, correspondientes a
depósitos de ladera, e incluso ya en la zona más próxima a su desembocadura
otros de origen marino.
Es concretamente en Epele, en donde el Urumea recibe a otro de sus
tributarios de importancia: la regata Landarbaso que delimita la mitad norte de
un enclave perteneciente a San Sebastián y que, con un curso de dirección
S.-O., aporta sus aguas al cauce principal a la altura de la localidad citada.
Si bien y en líneas generales la calidad de las aguas de esta regata es
excelente, hasta hace unos años su tramo bajo se encontraba fuertemente
contaminado por los vertidos del polígono industrial ubicado en Epele. Sin
embargo y como consecuencia de la incorporación de dichos vertidos al Colector
del Urumea, su calidad ha mejorado sensiblemente, habiendo aparecido incluso
algún ejemplar de salmón, síntoma evidente de su recuperación.
Si hasta Ereñozu la calidad de las aguas del río Urumea siempre ha sido
excelente, no se puede decir lo mismo de su cuenca baja, donde los vertidos
urbanos e industriales de poblaciones como Urnieta, la propia Hernani (Lastaola,
Carabel), Astigarraga-Ergobia e incluso de algunos polígonos industriales de
San Sebastián (Martutene, polígono 27) así como una serie de obras de defensa
acometidas (especialmente aguas abajo de Carabel), han impedido la capacidad
natural de autodepuración del río, de tal forma que éste ha sido incapaz de
asumir la carga contaminante que dichos vertidos le han impuesto, perdiendo sus
características "naturales" y la capacidad para mantener la vida
piscícola que le caracterizaba hasta casi la primera mitad del s. XX (trucha y
salmón como especies principales). Sin embargo, esta situación se ha revertido
sensiblemente en los últimos años con la construcción del Colector del Urumea,
al cual se han canalizado buena parte de los vertidos industriales y urbanos de
la zona, de tal forma que en la actualidad el tramo de Lastaola se puede
considerar una zona de transición entre la mejor conservada (cuencas alta y
media) y la situada aguas abajo de Ergobia (índice biótico BMWP', clase IV:
mala calidad), altamente contaminada debido a que parte de los vertidos de esta
zona no han sido recogidos todavía por el citado colector. De hecho, es
interesante remarcar que desde el punto de vista piscícola, en Carabel y ya en
el año 1.994 se registró la presencia de seis especies: salmón (Salmo salar),
trucha (Salmo trutta fario), ezkailu (Phoxinus phoxinus), anguila (Anguilla
anguilla), platija (Platichthys flesus) y locha (Noemacheilus barbatulus),
destacando por su alto valor ecológico más que por sus porcentajes (o,5% y
0,2%, respectivamente) las dos primeras. Sin embargo, cabe esperarse que las
obras de saneamiento iniciadas ya en esta zona, permitan una pronta
recuperación de un río que como el Urumea posee un importante potencial
atractivo no sólo para San Sebastián sino para buena parte de la comarca.
Son precisamente la contaminación y las obras de defensa llevadas a cabo
así como la propia implantación urbana e industrial y la utilización de las
riberas como áreas más fértiles destinadas a prados y cultivos las que han
provocado la desaparición mayoritaria de la vegetación autóctona de ribera en
este tramo bajo, correspondiente a alisedas cantábricas, con presencia un
árbol ribereño por excelencia: el aliso (Alnus glutinosa). Así, en la
actualidad, la presencia de dichas formaciones vegetales se reduce con
exclusividad a pequeñas manchas dispersas, aisladas y de entidad poco
significativa al paso del río por los municipios de Hernani y Astigarraga y muy
puntualmente a su entrada en el municipio de San Sebastián.
Ya dentro de San Sebastián, en donde el Urumea se adentra procedente de
Astigarraga, son numerosas las tributarias que recibe, contabilizándose un
total de unas 18, aunque muchas de ellas corresponden a pequeñas regatas y
arroyos de carácter temporal, sin un caudal significativo que aportar al cauce
principal. Hay que indicar además que los tramos finales de la mayor parte de
dichos afluentes se encuentran encauzados y soterrados como consecuencia de la
implantación urbana (caso de las regatas que descienden desde las inmediaciones
de la Policlínica y Miramón, regata Morlans, etc.).
La mayor parte de ellas y exceptuando la regata Landarbaso a la que ya se ha
hecho mención, poseen superficies de cuenca comprendidas entre 0,12 y 2 Km2,
con longitudes de cauce que van desde 0,3 Km hasta 2,8 Km. Merecen destacarse
tan sólo la regata Austitxo (Oiola/Oyola) que, procedente del monte Oriamendi
(165 m), discurre con un curso SE.-ENE. por la vaguada situada al sur de la zona
hospitalaria de San Sebastián virtiendo sus aguas por la margen izquierda del
curso principal aguas abajo del barrio de Sarrueta, y la regata Telleribia y su
tributaria Errazki que delimitan la divisoria municipal a la altura aproximada
de Martutene.
3.5.2 CUENCA DEL RÍO ORIA
La relación de la cuenca del río Oria con el municipio de San Sebastián
corresponde únicamente al enclave de Zubieta (entre Lasarte-Oria y Andoain), de
tal forma que su área de influencia es de tan sólo 11,34 Km2, porcentaje
ciertamente reducido (1,23%) si tenemos en cuenta que el río Oria, el de mayor
longitud del territorio guipuzcoano (78,5 Km), drena un cuenca total de 888 Km2.
Su nacimiento se sitúa en plena sierra de Aitzgorri, a partir de la
confluencia de numerosos arroyos y regatas que, procedentes de las cotas más
altas de la zona sur del territorio guipuzcoano, aportan sus aguas al Oria,
configurándolo como cauce único a partir de la altura aproximada de la
localidad de Otxaurte. Su cuenca alta presenta fuertes pendientes, ya que a tan
sólo escasos kilómetros de su cabecera se sitúa a cotas de 200 m, formando un
amplio valle fluvial en comparación con los restantes ríos guipuzcoanos, cuya
formación parece haber sido favorecida por la intensa erosión hídrica a la
que se ha visto sometida su cuenca alta, dejando al descubierto importantes
afloramientos de materiales de fácil erosionabilidad (arcillas triásicas). Si
hasta la altura de la localidad de Beasain, su caudal no es significativo
(caudal medio diario de 0,609 m3/s en el año hidrológico 95-96), en esta zona
el Oria recibe a tres importantes tributarios: el río Estanda por su margen
izquierda y los ríos Agauntza y Amundarain por la derecha, cuyas aportaciones
suponen un incremento muy significativo de su caudal. Tras su paso por los
municipios de Itsasondo, Legorreta y Alegia, el río alcanza la localidad de
Tolosa, en donde recibe a otros tres afluentes de importancia: los ríos Araxes
y Berastegui por su margen derecha y la regata Albiztur o Salubita por la
izquierda. Su recorrido continua hacia el municipio de Andoain, en el que recibe
el importante caudal aportado por su tributario el Leizarán (margen derecha),
que, procedente al igual que el Araxes de la vecina Navarra, presenta el mayor
caudal específico de toda la cuenca.
Una vez superada la altura de Andoain, el río entra en Lasarte-Oria,
localidad en la que su rumbo, hasta ahora SO.-N., cambia bruscamente, sufriendo
un giro de casi 90º para dirigirse, con rumbo E.-NNO. tras su paso por la
localidad de Usúrbil, hasta su desembocadura en el mar a la altura del
municipio de Orio.
Se trata de una cuenca fuertemente industrializada, especialmente en su tramo
medio, de tal forma que si los vertidos han supuesto un grado de contaminación
elevado de sus aguas, las numerosas obras de infraestructura (encauzamientos,
obras de defensa, etc.) y los propios asentamientos urbanos e industriales han
derivado en una mala conservación del hábitat fluvial, especialmente en su
cuenca media, entre las localidades de Beasain y Tolosa. Por el contrario, su
cuenca alta (aguas arriba de Zegama) posee una calidad buena de aguas, con una
fauna piscícola estable, mientras su cuenca baja, gracias a su menor
industrialización y a los aportes del Leizarán en Andoain, presenta cierto
grado de autodepuración aún cuando éste no es aún suficiente para mantener
poblaciones estables de truchas, siendo otros ciprínidos como el barbo (Barbus
graellsi), el ezkailu (Phoxinus phoxinus) y la loina (Chondrostoma toxostoma)
las especies dominantes.
Es precisamente en este tramo final, y concretamente antes de entrar en el
municipio de Lasarte-Oria, en donde el río Oria discurre por territorio
donostiarra, configurándose como divisoria entre Zubieta y dicha localidad así
como parcialmente de la de Usúrbil durante un recorrido total de casi 4 Km.
Durante este trayecto y especialmente a su entrada por la zona sur de Zubieta es
especialmente destacable su vegetación de ribera, correspondiente a una de las
aún pocas alisedas cantábricas de cierta entidad de todo el territorio
guipuzcoano, a pesar de que las actividades urbanas, industriales y
agropecuarias han supuesto una importante pérdida de las existentes antaño en
esta zona. La principal y prácticamente única tributaria del Oria en Zubieta
es la regata Abaloz. Con una superficie de cuenca de 9,32 Km2 en la que drena
areniscas y conglomerados (en cabecera) y margas y areniscas (en el resto de su
trayecto), y una longitud de unos 6-6,5 Km, dicha regata se configura a partir
de los aportes de diversos arroyos procedentes de la vertiente oriental del
municipio de Zizurkil, aportando sus aguas al cauce principal a la altura
aproximada de Buruntza, configurándose además como divisoria entre los
términos municipales de Zizurkil y Andoain así como de este último con
Zubieta, siendo de destacar de forma especialmente significativa la importante
extensión de bosques (robledal acidófilo-robledal bosque mixto) asociada a su
curso.
3.5.3 CUENCA DEL RÍO OIARTZUN
El área de influencia de la cuenca de este río a su paso por el municipio
de San Sebastián es escasamente significativa. Podemos hablar de una superficie
total de cuenca de en torno a 5,18 Km2, repartidas entre siete pequeñas regatas
que vierten sus aguas directamente a la ría de Pasajes (Pasaia), las
principales a Pasajes Ancho y el resto desde la ladera sur del monte Ulia a
Pasajes de San Pedro.
De todas ellas, la de mayor significación tanto por la superficie de cuenca
que drena (2,82 Km2) es la regata Arechijo o Zillargiñene, aguas abajo conocida
como Molinao, cuyo recorrido discurre por calizas arcillosas y margas del
Cretácico superior Su nacimiento se sitúa en la ladera suroccidental del monte
San Marcos a una cota aproximada de 150 m, si bien parte de la vaguada
correspondiente a su cabecera se encuentra en la actualidad ocupada por el
vertedero de Residuos Sólidos Urbanos (RSU) de San Marcos. Con una longitud
total que supera los 2,5 Km, esta regata nace con un curso de dirección SE-NO y
tras un recorrido aproximado de unos 625 m, sufre un cambio de rumbo, que pasa a
ser S-NE hasta su desembocadura en el puerto de Pasaia (cota 0 m), aunque en su
último tramo y en concreto a su paso por el barrio de Molinao, se encuentra
canalizada. Durante su trayecto y fundamentalmente por su margen izquierda
recibe los aportes de diversos tributarios que contribuyen a incrementar su
caudal aguas abajo, siendo los más importantes los que descienden de las
pequeñas vaguadas existentes al NE.-E. del caserío Lau Haizeta (regata
Mekearko, localizada en las proximidades del vertedero Amueder antes del cruce
con la autopista A8; regatas que nacen en la zona suroriental del barrio de
Alza) y que, con un curso de dirección NO.-SE., confluyen con el cauce
principal dentro del término municipal de Donostia-San Sebastián).
Los vertidos que recibe esta regata son numerosos. Así y además de los
propios lixiviados del vertedero y de cierta contaminación agraria difusa
derivada delas actividades agropecuarias desarrolladas en su entorno próximo (Lau
Haizeta, Molinao, Alza, etc.), esta regata recibe algunos aportes de aguas
residuales industriales de empresas localizadas en el citado barrio de Molinao,
los cuales afectan muy negativamente al ecosistema, de tal forma que la mayor
parte de su fauna piscícola (truchas), en tiempos abundante, ha desaparecido
casi por completo a pesar de las repoblaciones que de tiempo en tiempo se vienen
realizando en la zona.
3.5.4 CUENCA DE LA REGATA AÑORGA
Conocida desde el s. XI bajo la denominación de Gorga, las aguas de esta
regata no sólo estuvieron asociadas en tiempos pasados a una intensa actividad
molinera, sino que su calidad era tal que poseía una rica y variada vida
piscícola, desde cangrejos de río hasta truchas y anguilas. Estas últimas
eran pescadas ya en las proximidades de su desembocadura hasta principios del s.
XX, época en la que su cuenca baja era aún navegable.
Con una superficie de cuenca de 16,84 Km2, una longitud para el curso
principal cercana a los 7 Km y una pendiente media de la cuenca del 36,13%, su
nacimiento se sitúa en la divisoria de los términos municipales de Lasarte-Oria
y San Sebastián, configurándose como curso principal a partir de los aportes
de pequeños arroyos y escorrentías que, procedentes de las cotas más altas de
la zona occidental del barrio Añorga, aportan sus aguas al cauce principal en
las inmediaciones de la carretera N-I. La dirección de su curso, a lo largo del
cual drena mayoritariamente margas, es desde su nacimiento hasta la altura de
Rezola E.-NNE., sufriendo a la altura de la citada industria cementera un cambio
de rumbo que pasa a ser N.-NNO. hasta prácticamente su desembocadura, la cual
tiene lugar en Tximistarri.
El intenso crecimiento urbano experimentado por San Sebastián hacia dicha
zona y la configuración del barrio de Añorga como un nudo viario básico que
ha implicado la creación de diversas infraestructuras de comunicación, bien de
paso (hacia Francia o Bilbao: A8, hacia Vitoria: A-I) o bien de acceso a San
Sebastián, ha supuesto que en la actualidad la mayor parte del curso de esta
regata se encuentre cubierta, de tal forma que se hace bastante dificultoso
poder seguir fielmente su recorrido, el cual, sin embargo, es fácilmente
identificable en los mapas antiguos de San Sebastián.
El principal tributario de la regata Añorga es la regata conocida como Igara
(también denominada Articula). Con un recorrido de aproximadamente 6 Km y un
curso de dirección E.-NE., su nacimiento se sitúa a una altitud de unos 200 m
en las inmediaciones del monte Mendizorrotz (ladera sur-oriental), constituyendo
la divisoria entre los municipios de San Sebastián y Usurbil. Tras un recorrido
sinuoso, en el que recibe los aportes de numerosos tributarios por ambas
márgenes y asociado al cual se conserva uno de los escasos robledales-bosques
mixtos del territorio donostiarra, confluye con el curso principal a la altura
del barrio de Igara.
3.5.5 CURSOS DE AGUA QUE VIERTEN DIRECTAMENTE AL MAR CANTÁBRICO
Corresponden a las regatas o pequeños arroyos que procedentes de las cimas
más altas de la alineación costera (Mendizorrotz-Igueldo y Ulia), recogen
caudales de escasa significación que son aportados directamente al mar. Cubren
una superficie conjunta de entre 5,5 y 6 Km2, caracterizándose todas ellas por
pendientes pronunciadas y por drenar areniscas y lutitas del Eoceno inferior,
materiales todos ellos que componen el sustrato básico de la alineación
costera, desde la localidad de Orio hasta Punta Biosar en Hondarribia (Fuenterrabía).
De todas ellas y a pesar de su escasa longitud y caudal, son especialmente
destacables, por su mayor desarrollo, las localizadas en la vertiente norte del
monte Mendizorrotz, una de las cuales se constituye como divisoria entre los
municipios de Orio y San Sebastián, aunque ambas vierten sus aguas en el área
occidental de la Playa de Aguiti.
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